23 de junio de 2009

Mi Antonita


En medio del dolor de cabeza, jaqueca, vòmito, rinitis y todas las itis, me acordè de una anécdota muy entretenida que nos pasó con mi Andreita (ella trabaja conmigo en la sala). Resulta que estábamos trabajando con los niños en la confección de títeres de calcetines, de un tema muy especial: los animales. Para ello, decidimos presentarles un pegamento especial para que los materiales pegaran en el famoso calcetín, este era la silicona líquida. Les dijimos: "Niños, este pegamento especial lo vamos a usar con un palito de fósforo porque se les puede pegar en las manos"...Antonia no quiso usar los palitos, porque igual le costaba trabajo meterlo, sacarlo y echar en el calcetìn, entonces usó sus dedos y adivinen qué: Se le ocurre tomar la lana...con cara de afligida, intenta sacarse la lana pegada con su otra mano y repitió esta acción como tres veces, con cara arrugada y enojada. Por supuesto con la Andreita la miramos y nos reíamos mucho, dejándola solucionar el problema sola. Finalmente la ayudé y se fue a lavar las manos. No quiso volver a usar la silicona.

No hay comentarios:

Publicar un comentario